Episodio de Relleno

A veces uno no sabe que hacer o como actuar, bueno, eso a veces me pasa a mi con este blog. Me comprometí conmigo mismo a sacar material nuevo relativamente en cortos períodos de tiempo por lo menos durante el verano y eso a veces me sobrecarga, así que me quedo sin ideas sobre qué escribir, y empiezo a divagar con cosas bobas como los huevos de tortuga, de los cuales mi hermana dice que se ven apetecibles, pero yo no soy de los que andan por la vida mirandoles los huevos a las pobres tortuguitas, ya tienen suficiente con su pobre vida.

Bueno, solo decidi escribir lo que se me viniera a la mente y ya. Y creo que está resultando...

Ahora quiero pasar a un tema más profundo y confesar algo...

Yo nunca usé yeso cuando era chico. Sí, es la triste verdad, no salía mucho a la calle porque mis vecinos más jóvenes me triplicaban en edad, nací justo en el barrio de los vejetes de mi ciudad. Paradójicamente, vivo relativamente cerca de un cementerio, yo creo que debe ser por la cercanía y la comodidad, y no se rían porque es un problema serio. Los fines de semana veía bastones en lugar de pogos saltarines, si es que salían a la calle porque la mayoría de las veces no había nadie (aparición del arbusto rodante de nuevo). Era horrible, se los aseguro. Por suerte ahora el internec me mantiene ocupado y me hace no pensar en ello. Es un alivio porque ya no soportaba vivir así.

La próxima vez hablaré realmente de los episodios y personajes de relleno