He dicho públicamente muchas veces que aborrezco Crepúsculo y que no me gusta Harry Potter. Pero no es solo porque si. Hay razones.
Harry Potter es lectura infantil, y no me ataquen, está catalogada así por todos (excepto por los británicos, extrañamente lanzan dos versiones, una de niños y una de adultos. Con razón por ahí se rumorea que no ganan guerras sin la ayuda de los Estados Unidos. Pero dentro de ese contexto, y lean atentamente porque no lo repito mucho, lo tiene todo. Es una magnífica obra llena de detalles, personajes con personalidades reales, hechos que dentro de lo fantástico no pierden mucha credibilidad al suscribirse a la "magia" existente en la obra. Tiene un personaje que no está fijado a ningún canon de "perfección" y que se equivoca, se queda solo, y a veces logra conquistar a alguna compañera asiática de intercambio para ver como se le escapa al final a su país perdido en lo más recóndito del mundo.
A final de cuentas, es mejor que Crepúsculo, por lejos (personajes creíbles con trasfondo Real, situaciones que no son forzadas, libro que es realista en cuanto a su clasificación como infantil) Pero lo más importante es que toma algo ya visto como es la hechicería y logra hacer una historia totalmente nueva, en lugar de tomar algo antiguo (y extremadamente trillado) y combinarlo con una historia contada millones de veces a lo largo de la humanidad.
Otra cosa interesante es que Harry Potter tiene una fanaticada que vale oro.
La opinión de los críticos es que las películas son buenas, pero nadie quita que sean 2 horas y media pegado al asiento del cine para ver recién 1/8 de la saga completa. Bueno, pero a pesar de largas esperas entre las películas, largos ratos sentados frente a una pantalla, libros de 800 páginas, y muertes de personajes queridos, ancianos, y algo "alternativos" para sus gustos, los que les gusta Harry Potter las siguen esperando y siguen sin decepcionarse (o por lo menos lo aparentan). Si, J. K. Rowling escribe mejores libros que Stephenie Meyer.